La historia de un palacio en El Puerto de Santa Maria

Unos de mis proyectos españoles, tan fascinada que estoy yo con este palacio increíble donde ahora vivo, es entender más a la casa.  “Casa,” en realidad, no es la palabra correcta; el registro donde hay toda la documentación de las casas de El Puerto, la nombra como una casa-bodega.  Pero para mí, es un palacio, y yo soy su reina!

 

La reina de Puerto en casa

Nuestra palacio se llama la Casa O’Ryan, el nombre del inmigrante irlandés que lo construyó.  (En este época creo que el apellido era solo “Ryan,” pero supongo que siendo el nieto de los Ryans originales de Irlanda, él está autorizado a anteponer la “O,” que significa “nieto de.”)  Thomas Ryan era el hijo de inmigrantes irlandeses  que vinieron a Cádiz en la segunda mitad del siglo XVIII, cuando Inglaterra, a través de Cromwell, estaba confiscando todas las fincas y bienes de los católicos irlandeses.  Despojados de todas sus propiedades y casas, muchos decidieron emigrar a España.

Bienvenidos a mi palacio

¿Por qué España?  Asombrosamente para mí, hay una profunda conexión entre España e Irlanda.  En los primeros siglos de catolicismo, Irlanda estaba supuestamente invadido por unos tipos españoles.  Ambas leyendas españoles e irlandesas hablan sobre un líder magnífico de Galicia quien navegó junto con sus soldados por el mar hasta Irlanda, donde conquistaron (por así decirlo) la población irlandesa y nunca regresaron a España.  O algo asi.  Milesian es el anglicanización de “Mil Espáine,” o siguendo el latín, Miles Hispaniae, “soldado de España.”   En el siglo XVIII, ambas Irlanda y España conocieron esta leyenda (aunque no parece que sea verdad), y basado en esto, el Rey Carlos II de España proclamó que “los irlandeses siempre han disfrutado los mismos derechos que los españoles,” que era después confirmado a través de un decreto del Rey Felipe V y el Rey Carlos IV.  ¿Quien sabía esto??

Milesian no aguanta un insulto de los celtas

Entonces Thomas Patrick Ryan era bien consciente de sus raíces españolas, y se decidió a plantar sus raíces permanentemente en El Puerto de Santa Maria.  Él construyó esta casa en 1773 después de casarse con Margaret Francisca Terry MacNamara, la hija de William Terry de Málaga.  Los Terrys de Málaga eran muy ricos, entonces este matrimonio era un gran paso hacia adelante para Thomas Patrick.

Un espacio encantador

Para levantar aún mas su posición en la sociedad española, Thomas Ryan aparentemente solicitó y recibió un título:  Hidalgo.  Él tuvo que entregar todo sobre su linaje de Irlanda, que pareció impresionar mucho a los oficiales españoles hasta que ellos le concedieron el título.  ¿Tal vez en esta época él inventó el escudo de armas que cuelga ahora encima de la puerta de la casa?

El latín dice, "Mejor la muerte que sufrir una mancha"

La casa (o palacio, como yo prefiero llamarla) permaneció en la familia Ryan hasta 1844, cuando uno de los hijos (o nietos, no lo sé) de Thomas Patrick se decidió a venderla.  Mientras, habia cambiado el nombre irlandés de “Ryan” a “Rian,”  y un Don Ignacio Alberto Rian vendió la casa-bodega a Don Benito Ricardo y Ricardo y su esposa Doña Catalina Paul y Ymas.   Ellos permanecieron en la casa los siguientes 50 años.  Doña Catalina vendió el palacio en 1893 y fue revendido en 1895, recayendo en la familia de Don Ramon Jimenez Varela durante los siguientes 60 años.  Don Ramon compró la casa por solo 25,000 pesetas, o cerca de 4000 euros.  ¡Que gran trato!

La puerta principal tiene mucha gracia

El palacio permaneció en la familia Jimenez despúes de la muerte de Don Ramon y también después de la muerte de su heredero, Don Ernesto.  Doña Rafaela Sancho Mateos, la viuda, subdividió la propiedad, separando la casa de la bodega y alquilando solo la bodega.  Cuando ella murió en 1954, los seis hijos adultos vendieron rápidamente el palacio a la familia Caballero Noguera, otra famosa familia portuense de bodegueros.  Esta vez la casa fue vendida por 35,000 pesetas, pero en el dinero de hoy y debida a la inflación, serian unos 800 euros.  ¡Si solo yo hubiera estado aquí para comprarlo en esta época!

Donde se guardan las llaves del palacio

El palacio permaneció en la familia Caballero Noguera durante los siguientes 20 años.  De vez en cuando encuentro a gente que conoció la casa íntimamente durante los años de los Caballeros; mi compañera de baile, Isabel, pasó muchos veranos aquí en esta casa con los Caballeros, y me han presentado a Carlota Caballero, que creció aquí. 

Palacio de mis sueños

En 1973 Tomás Terry Merello compró la casa, creo que para su novia, Ana Rosa Pidel, y comenzó con una reforma extensa y enorme para este magnífico palacio que, me han dicho, estaba casi en ruinas.  Él cambió la escalera principal de una esquina a otra, añadió otro piso en la parte de atrás, y cambió el sitio de la cocina, entre otras cosas.  Él utilizó muchas materias auténticas y antiguas para mantener la casa en la época en la que fue construida.  Cada baño tiene su proprio color de azulejos:  azul, verde, turquesa, o ¡rosa oscuro!

El baño azul

Mucha de la madera para las vigas y muchas puertas del palacio son de caoba, una madera sudamericana que resiste los insectos que comen la madera.  Dos de las fuentes vinieron de un monasterio cerca, y muchas de las luces, puertas, y otros detalles vinieron de otros palacios en los alrededores. 

Pasillo a los dormitorios

Una de las glorias de la casa es el fresco pintado en mi estudio, del artista portuense Juan Lara.  Juan Lara se hizo con un nombre como artista pintando en México, donde fue mas conocido, pero aquí en Puerto él es muy famoso, incluso un instituto lleva su nombre.  El fresco es enorme y maravilloso, y te da la sensación de estar dentro del cuadro viviendo en un trocito del pasado.

Y la lámpara, con 150 años, ¡tampoco es mal!

El patio central estaba antiguamente abierto al aire libre y fue cerrado mas tarde, aunque el cristal todavía tiene ventanas y una parte siempre abierta para ventilar la casa.  La casa fue originalmente construido como casa de verano y no fue acondicionada para el invierno (eso es obvio porque no hay ninguna chimenea).  Hay otra patio mas pequeño atrás en dirección al jardín, y un tercero, aun más pequeño, al lado del estudio. 

Una vista del azotea hasta el patio a través la critalera

Patio exterior principal, hasta el jardín

Patio pequeño, desde mi estudio (cuarto de Juan Lara)

Las obras de arte del comedor son especialmente impresionantes.   El cuadro principal es de la Virgen de Guadalupe de México.  La virgen se apareció a un indígena, luego nombrado San Juan Diego Cuauhtlatoatzin, y le ordenó informar al obispo para construir un santuario dedicado a ella en este lugar.   El obispo se negó a hacerlo, demandando prueba de la aparición de la Virgen.  La Virgen se apareció de nuevo a San Juan Diego, invitándole a subir a la cima de un cerro.   A pesar del tiempo invernal y el árido clima, Juan Diego encontró muchas flores bonitas y exóticas, que recolectó.  La Virgen le dijo que las llevara al obispo como prueba.  Él las puso en su ayate o tilma, un tipo de capa para la cosecha.  Delante del obispo, el abrió la tilma y de allí salieron todas las flores, e inexplicablemente una imagen de la Virgen grabada y pintada en la tela de la tilma.

Un comedor suficiente para muchos, con la Virgen guardando a todos

Y la cocina, la cocina!  Es enorme.  Es un placer cocinar en este espacio, con un lugar para cada cosa y almacén de sobra, una despensa gigante, y preciosos azulejos azules sobre los armarios rústicos.  No me importa nada que no haya lavavajillas (pusimos uno atrás en el cuarto de la lavandería, y transportamos los platos por aquí y allá), ¡¡tenemos dos fregaderos!!  Tia y Sasha han aprendido a lavar los platos perfectamente.

La Alegria de Cocinar

Por fin, ¡tenemos dormitorios!   Y dormitorios, y dormitorios.   6 a decir exactamente, y 6 baños.  Todos  lindísimos y llenos de luz.  Hay uno para cada uno:  Elegante, acogedor, divertido para los niños, joven y de moda, y el del Conejito de Pascua (esta es la habitación de Sasha!).   Es una casa perfecta para tener invitados.

Nuestro dormitorio, lleno de luz y ¡tan oscuro con las contraventanas cerradas!

La habitación de moda de mi hija Tia

El cuarto de las criadas, pintado de turquesa para Sasha

El dormitorio de Suzanne y Ethan, con vista preciosa al jardín

La habitación de mis sobrinos, también llamada "El Nido de los cucos," donde Todd se escapa para la siesta

Y por fin el cuarto de los invitados...ja, ja!

Recientemente tuve la suerte de tener a Carlota Caballero en mi casa, para hacer un paseo por los recuerdos.  Caminamos juntas a través de la casa, y ella me habló de su niñez y las cosas que ella recuerda de haber crecido aqui, desayunando en el cuarto de la cristalera, montada a caballito en la espalda de una de las criadas mientras ellas limpiaban el suelo, corriendo bajo la magnífica magnolia en el jardín, y saltando del trampolín de la piscina con sus primos.  Ella notó la reforma sustanciosa que hizo Tomás Terry, incluso la relocalización de la escalera principal (con todos los escalones originales) y la adición en la parte de atrás al lado del jardín.   Todavía ella podía reconocer la casa, especialmente el patio interior.  Era un encanto pasar la mañana con ella, alguien que conoce íntimamente bien este palacio, y compartirlo con ella de nuevo.  ¡Así es mi buenísima suerte aquí en España!

Todd quiere mucho a su gatito